Mi terapia inicia con una MEDITACIÓN GUIADA que tiene como objetivo general relajar totalmente a la persona; disminuyendo sus niveles de estrés, de ansiedad, de tristeza o depresión (en caso de sentirla), acallar la mente y liberarla de las preocupaciones diarias. A través de la meditación guiada que practico con mis pacientes, estimulo la auto-curación, estimulo las zonas del cerebro asignadas a la felicidad y a la alegría y estimulo su sistema inmunológico.

 

“Al aquietar la mente y no estar haciendo nada en concreto, la energía se desplaza e instala en el centro del pecho (charka del Corazón); mientras que cuando estás activo, la energía se dirige hacia afuera. Actuar es una forma de salirse de uno mismo. No actuar es una for­ma de entrar en uno, por lo que al meditar te conectas contigo mismo y con tu Divinidad, sintiendo bienestar, paz y tranquilidad.”

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Afortunadamente, y al contrario de lo que ocurre con muchas terapias alternativas, la meditación es compatible con el método científico, de manera que ya podemos decir que los efectos fisiológicos que ejerce la práctica de la meditación están científicamente probados.

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Después de la Meditación Guiada, continúo con el proceso de IDENTIFICACIÓN Y LIBERACIÓN DE EMOCIONES NEGATIVAS ATRAPADAS.

 

Una vez la persona está totalmente relajada, empiezo a identificar, a través de las respuestas que me da su sub-consciente, las emociones negativas atrapadas que tiene en su cuerpo (una emoción negativa atrapada, es una bola de energía densa que no vibra en armonía con el cuerpo y distorsiona su vibración, generando malestar o dolor y posteriormente enfermedad) descubro exactamente el momento en que se generó esta emoción y porqué se generó, para posteriormente, identificar el lugar que está ocupando en el cuerpo físico y así, desbloquearla y eliminarla. Es así como sucede la sanación definitiva, desde la raíz del problema.

Puedo liberar la cantidad de emociones negativas que el paciente esté dispuesto a liberar; esta decisión no la toma la persona de manera consciente, por lo cual yo indago a su sub-consciente hasta donde podemos liberar en cada sesión.  

 

Una vez liberadas las emociones, después de la sesión, la persona puede sentir algo de mareo, un poco de dolor de cabeza, nauseas o cualquier tipo de dolencia, que NO es para nada grave, es simplemente el ajuste y la limpieza que está haciendo el organismo al liberarse de esas energías discordantes  reemplazándolas por energías de luz y sanación.  

 

Cualquier tipo de emoción, por negativa y densa que sea, se puede desbloquear y eliminar generando bienestar y salud con la terapia que ofrezco.

 

Luego, continúo DESBLOQUEANDO Y ALINEANDO LOS CENTROS ENERGÉTICOS (Chakras) con la energía de sanación universal Reiki y tocado ligeramente unos meridianos o puntos corporales específicos por los cuales fluye nuestra energía vital, de manera que se estimulan y desbloquean. 

 

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Finalizó la sesión haciendo algunas RECOMENDACIONES de acuerdo a lo encontrado durante la Terapia.